Sin segregación de naturaleza alguna, desde
nuestros inicios, nuestra misión siempre ha sido dar soporte y ayuda necesaria a las
personas que por sus conductas de abuso son marginadas de la sociedad hasta que las adicciones les hace ser prescindibles; se les excluye, menosprecia y persigue. En nuestro centro ofrecemos atención para personas
con infinidad de padecimientos relacionados con la adicción a fármacos,
a sustancias psicotrópicas, al alcoholismo juvenil crónico, las ludopatías, etc; ofreciendo una especial dedicación a las mujeres por ser, junto a los enfermos mentales, resulta ser el grupo más vulnerable y menos reconocido. Trabajamos por la Paridad de Plazas entre Varones y Mujeres.
En la
fundación atendemos de manera presencial a todas las personas afectadas con los recursos necesarios para
su acogida, integración en el entorno rural compartido, desintoxicación, rehabilitación y soporte para su re-inserción en la vida familiar-social.
