Diagnóstico
Es probable que primero consultes con el
proveedor de atención médica primaria. Si el proveedor de atención
médica sospecha que puedes tener un problema con el alcohol, es posible
que te remita a un profesional de salud mental.
Para evaluar tu problema con el alcohol, es probable que el profesional haga lo siguiente:
- Haga algunas preguntas relacionadas con tus hábitos de bebida.
El proveedor de atención médica puede pedir permiso para hablar con
familiares o amigos. Sin embargo, las leyes de confidencialidad no
permiten que el profesional comparta información sobre ti sin tu
consentimiento.
- Realice un examen físico. El proveedor de atención
médica puede hacer un examen físico y preguntarte sobre tu salud.
Existen muchos signos físicos que indican complicaciones por el consumo continuado
de alcohol.
- Recomiende análisis de laboratorio y pruebas por imágenes.
Si bien no existen análisis específicos para diagnosticar el trastorno
por consumo de alcohol, ciertos patrones en los resultados de los
análisis de laboratorio pueden confirmarlo. Y es posible que
necesites algunos análisis y estudios complementarios para identificar problemas de salud que
puedan estar relacionados con el consumo de alcohol. En los análisis, se
puede ver el daño a los órganos.
- Haga una evaluación psicológica. Esta
evaluación incluye preguntas sobre tus síntomas, pensamientos,
sentimientos y patrones de comportamiento. Es posible que te pida que
completes un cuestionario para responder estas preguntas.
Atención en Mayo Clinic - EEUU
trastorno por consumo de alcohol: Atención médica en Mayo Clinic
Tratamiento
El tratamiento para el trastorno por
consumo de alcohol puede variar en función de tus necesidades. El
tratamiento puede incluir una intervención breve, asesoramiento
individual o grupal, un programa como paciente ambulatorio o una
estancia con residencia como paciente internado. La meta principal del
tratamiento es trabajar para suspender el consumo de alcohol a fin de
mejorar la calidad de vida.
El tratamiento para el trastorno por consumo de alcohol puede consistir en lo siguiente:
Reconocimiento: Lo primero que hay que hacer es el
diagnóstico de la enfermedad, con una fase posterior de sensibilización
del paciente y motivación para que colabore activamente en el
tratamiento.
El reconocimiento del problema será la base de toda intervención posterior. Plan Nacional sobre las Drogas.
Desintoxicación y abstinencia. El tratamiento
puede comenzar con un programa de desintoxicación, que es la abstinencia
controlada por un médico, y suele durar de 2 a 7 días. Es posible que
debas tomar sedantes para prevenir los síntomas de abstinencia.
Usualmente, la desintoxicación se realiza en un centro de tratamiento
para pacientes internados o en un hospital.
En formas cronificadas, mayores de 35 años: La intervención consiste en el tratamiento de
la intoxicación crónica o desintoxicación:
el alcohol debe suprimirse de
forma brusca y total.Frente a la posibilidad elevada, el
paciente observe síndrome de abstinencia - por mínimo que impresione - se iniciará una pauta
farmacológica con re-hidratación vía intravenosa con suero salino, nunca glucosado, vitamina B1 endovenosa, sedantes
específicos y después una dieta rica en hidratos de carbono. En asociación de otras enfermedades asociadas, la
desintoxicación deberá llevarse a cabo en con el paciente hospitalizado y bajo los controles clínicos adecuados.
Aprendizaje de nuevas habilidades y elaboración de un plan de tratamiento.
Por lo general, este proceso supone la participación de especialistas
en el tratamiento contra el consumo de alcohol. Puede comprender el
establecimiento de metas, técnicas para el cambio de comportamiento, el
uso de manuales de auto-ayuda, asesoramiento y atención de
seguimiento en
un centro de tratamiento.
Asesoramiento psicológico. El asesoramiento y
la terapia grupal e individual te ayudan a comprender mejor tu problema
con el alcohol y apoyan la recuperación desde los aspectos psicológicos
del consumo de alcohol. Puedes beneficiarte de la terapia familiar o de
pareja; el apoyo familiar puede ser una parte importante del proceso de
recuperación.
Uso de medicamentos orales. Un medicamento llamado
disulfiramo puede servir de apoyo a evitar que bebas, pero no curará el trastorno
por consumo de alcohol ni eliminará los deseos de beber. Si bebes alcohol
mientras tomas disulfiramo - Antabús (R), el medicamento produce una reacción física
que puede consistir en enrojecimiento, náuseas, vómitos y dolor de
cabeza no siendo aconsejable prescribir en personas alcohólicas crónicas mayores.
La naltrexona, un medicamento que bloquea el efecto placentero que
provoca el alcohol, puede prevenir el consumo excesivo y reducir las
ganas de beber. El acamprosato puede ayudarte a combatir el deseo de
consumir alcohol una vez que hayas dejado de beber. A diferencia del
disulfiramo, la naltrexona y el acamprosato no provocan malestar
después de beber.
Medicamentos inyectables. El Vivitrol (R) es un formato inyectable de naltrexona que un profesional de la atención
médica inyecta una vez al mes. Aunque puede tomarse un medicamento
similar en forma de comprimidos, la versión inyectable puede "asegurar" un tiempo de forma constante para las personas que se están recuperando.
Apoyo continuo. Los programas de pos-tratamiento
y los grupos de apoyo ayudan a las personas que se están recuperando
del trastorno por consumo de alcohol a dejar de beber, controlar las
recaídas y enfrentar los cambios necesarios en el estilo de vida. Esto
puede comprender la atención médica o psicológica, o tener que asistir a grupos de apoyo que se ofrecen en toda la geografía de Catalunya..
Tratamiento de problemas psicológicos. En
general, el trastorno por consumo de alcohol se produce conjuntamente
con otros trastornos de salud mental. Si tienes depresión, ansiedad u
otra afección de salud mental, es posible que necesites terapia de
conversación (psicoterapia), medicamentos u otro tratamiento.
Tratamiento médico para trastornos de la salud.
Una vez que suspendes el consumo, muchos problemas de salud
relacionados con el alcohol mejoran significativamente. Pero algunas
afecciones médicas pueden necesitar tratamiento continuo y atención de
seguimiento.
Práctica espiritual. Para las personas que
están involucradas en algún tipo de práctica espiritual regular puede
ser más sencillo continuar con la recuperación del trastorno por uso de
alcohol u otras adicciones. Tener una mayor comprensión del lado
espiritual es un elemento clave en la recuperación de muchas personas.
Si tienes un
trastorno grave por consumo de alcohol, es posible que necesites
internarte en un centro de tratamiento residencial. La mayoría de los
programas de tratamiento residencial comprende terapia individual y en
grupo, grupos de apoyo, conferencias educativas, participación familiar y
terapia de actividad.
Por lo general, estos programas incluyen asesores matriculados en
alcohol y drogas ilícitas, trabajadores sociales, personal de
enfermería, médicos y otros profesionales con pericia y experiencia en
el tratamiento del trastorno por consumo de alcohol.